Se trata de "La extracción de la piedra de la locura", "Las tentaciones de San Antonio Abad" y "Mesa de los pecados capitales".
MADRID, España.- El Museo del Prado insistió hoy en reafirmar la autoría de tres de las obras que posee de El Bosco, en contra de lo que afirma el Proyecto de Investigación de Conservación internacional que considera que esos cuadros atribuidos al pintor flamenco, en realidad fueron realizados por discípulos.
El director adjunto del Prado, Miguel Falomir, aseguró que las razones esgrimidas por el proyecto, liderado por Holanda pero en el que participan expertos internacionales, “muy al contrario” de desatribuir la autoría de El Bosco, en realidad “la avalan”.
Durante los últimos seis años, esos expertos han estudiado y documentado de forma intensa y sistemática prácticamente toda la obra del maestro con las técnicas más innovadoras y en sus conclusiones afirman que “La extracción de la piedra de la locura”, “Las tentaciones de San Antonio Abad” y “Mesa de los pecados capitales” no son obra del pintor flamenco.
Falomir aseguró que respetan las conclusiones de sus colegas sobre estas tres obras, pertenecientes a los fondos del Prado, pero “en modo alguno” las comparten.
En la presentación de la gran muestra que el Museo del Prado dedicará al maestro holandés, su comisaria, Pilar Silva, reiteró que “nadie que no fuera El Bosco hubiera sido capaz de hacer una composición, una creación, como ‘La mesa de los pecados capitales'”.
En palabras de Falomir, la postura del Prado no es inmovilista para defender sus obras ya que, como se ha demostrado en anteriores ocasiones “el Prado no ha tenido empacho”, por ejemplo en reconocer otras autorías como ocurrió con la pintura de la Infanta Margarita que estaba atribuida a Velázquez.
“Cuando hay argumentos, se escucha, y en este caso hemos estudiado sus consideraciones y no nos convencen”, afirmó Falomir quien recordó que para atribuir o desatribuir una autoría hay que plantear diferentes argumentos técnicos.
Uno de ellos es la dendrocronología, que determina los años de que datan las maderas sobre las que están pintadas las obras. En los casos de estas pinturas, el tiempo en que fueron cortadas las maderas coinciden con los que Jerome van Aken, El Bosco, (1453-1516), estaba activo.
Otros estudios científicos hacen referencia a los análisis de los pigmentos. “Los estudios revelan que ninguno de los materiales utilizados en ellos es ajeno a la obra del Bosco. Estos estudios no te dicen quién ha pintado la obra pero sí quién no lo ha hecho”.
Según Falomir, los expertos del proyecto han interpretado estos datos de una manera “y nosotros lo hacemos de otra”.
Al respecto, Pilar Silva, jefa de Departamento de Pintura española (1100-1500) y Pintura flamenca y Escuelas del norte del Prado, detalló más razones por las que el Museo del Prado está “absolutamente convencido” de que las tres obras son de El Bosco.
Silva explicó sobre “La mesa de los pecados capitales” que tanto la técnica de preparación como la de imprimación es la habitual en el artista.
Y aunque el dibujo subyacente es muy variado y existen numerosas rectificaciones y cambios entre esta fase y la del color, “hay que tener en cuenta que si algo le gusta al Bosco es no repetirse. Su originalidad es la norma, el leit-motiv de su forma de trabajar”.
Para Silva “no hay nada que nos indique que esta obra no es del Bosco, la técnica en superficie no deja lugar a dudas. Nadie que no fuera el Bosco hubiera sido capaz de hacer una composición, una creación, como esta sobre una escena que hasta entonces se representaba de una manera muy distinta”.
En lo que respecta a la “La extracción de la piedra de la locura”, la comisaria recordó que se cuestiona principalmente por el paisaje, demasiado esfumado tipo Leonardo, “pero está hecho directamente con la libertad típica del Bosco. No hay nada aquí que no sea Bosco”.
En lo que respecta a “Las tentaciones de San Antonio”, se sabe que hacia 1540 en Flandes, “la obra sufrió un problema de conservación que afectó fundamentalmente a la figura del santo, en la capa pictórica. Como en ese momento lo que se llevaban eran los paisajes, llenaron de hojas la parte de arriba”.
Pilar Silva, quien pidió que se le borrara del Comité del Proyecto de Investigación, considera que si los miembros del mismo son científicos “tienen que estar dispuestos a rectificar”, mientras que Miguel Zugaza, director del Prado, cree que es “poco coherente” encontrar al Bosco en la tabla de San Antonio del Museo de Arte Nelson-Atkins de Kansas, recientemente atribuida al pintor, y no encontrarlo en las suyas.
EFE.